Los relojes de pulsera surgieron para los aviadores a finales del s. XIX, cuando estos se veían dificultades para sacar su reloj de bolsillo y mirar la hora al pilotar.

Estamos seguros/as de que en algún momento has mirado alguna parte de tu reloj y te has preguntado «¿Para qué servirá esto?». Y es que, dependiendo del modelo de la pieza, este podrá incorporar desde la estructura más básica hasta los detalles más remotos que puedas imaginar, y que en situaciones nos pueden servir de gran ayuda; si sabemos como utilizarlos, claro está.

Con todo ello, te traemos la entrada que te hará aprovechar al máximo cada uno de tus relojes. Seas fanático o aficionado, en este blog comprenderás las partes de tu reloj y su función.

SUS PARTES MÁS SIMPLES

1. Dial o esfera

Es la cara del reloj. Se trata de la zona donde se muestran los números y las manecillas. La esfera puede cambiar de material y color, así como puede tener un diseño transparente que nos deje observar la maquinaria interna, lo que llamamos «esfera esquelética».

2. Bisel

Compuesto por el anillo que fija el cristal al reloj. Este puede tener función o ser simplemente un elemento de decoración. Entre las funciones que puede ejercer se encuentra: cronómetro y lector de horas de otra zona horaria.

3. Caja

Podríamos considerar que la caja es el elemento más importante del reloj, debido a que es la que sujeta y soporta todas sus partes. Lo normal es que se encuentre compuesta de acero o incluso de cerámica o metal, pero también hay algunos relojes más sofisticados que tienen su caja compuesta de plata u oro.

4. Cristal

Es la protección del reloj y sus zonas internas a la caja. Además, nos permite observar a través de él. Su composición puede ser cristal o plástico, aunque lo que más se utiliza a día de hoy y, teniendo en cuenta su resistencia, es el zafiro.

5. Corona

Se trata de la pequeña rueda que se encuentra marcando el número 3. Esta tiene la gran utilidad de configurar el día y la hora del dispositivo, además de dar cuerda al reloj en aquellos mecánicos. Las coronas suelen estar enroscadas en aquellos relojes sumergibles, para evitar que se cuele agua en su interior; por lo que siempre deberemos fijarnos en que está completamente enroscada.

6. Manecillas

Las manecillas son las que nos permiten conocer la hora, ya que señalan los números correspondientes. Estas manecillas pueden señalar únicamente las horas y los minutos o señalar también los segundos. Las manecillas suelen ser más corta la dedicada a las horas y más larga a los mínutos, para poder ser más especifico. Por último, la manecilla de los segundos suele ser la más delgada.

7. Marcadores

Se trata de los indicadores que, junto a las manecillas, nos permiten leer la hora. Pueden estar formados por números o líneas, entre otros. En concreto, se puede tratar de numeración arábiga, romana, de diamante (con circonitas o diamantes) y de líneas (con líneas que marcan los números).

8. Orejetas o asas

Suponen el punto de unión entre la caja y la correa o cadena del reloj. Nos permiten cambiar este brazalete, pero para ello deberemos conocer la medida que hay entre ambas orejeras, y de este modo seleccionar una correa de tamaño adecuado.

9. Brazalete, pulsera o extensibles

Es el que nos permite llevar el reloj en la muñeca. El brazalete puede ser de correa, cadena o caucho. Siendo los materiales más comunes el cuero, el nylon, la silicona, el metal y el acero.

SUS PARTES MÁS COMPLEJAS

10. Pulsadores

Los pulsadores son los botones que se encuentran a los lados de la corona en algunos relojes. Puede estar presente uno o dos pulsadores. Estos son los encargados de configurar funciones más precisas y complejas como el cronógrafo, aunque otras veces únicamente cumplen una función decorativa.

11. Sub-dial o sub-esfera

Estas son las pequeñas esferas presentes en algunos de los relojes, y que muestran datos como: el calendario, el cronómetro, los segundos (en el caso de no tener manecilla que marque los segundos) e incluso las complicaciones de las fases lunares. Dependiendo del modelo del reloj, este podrá llevar una, dos o tres sub-esferas.

12. Movimiento del reloj

Aunque se trata de una funcionalidad y no un elemento concreto, es crucial conocer el movimiento del reloj para seleccionar uno y adquirirlo. El movimiento del reloj es el tipo de mecanismo que lo impulsa y lo hace funcionar. Los más conocidos son:

– Cuarzo: Obtiene la energía de una batería o pila y proporciona una hora muy precisa. Son relojes más económicos porque requieren menos componentes que los relojes con otros movimientos.

– Mecánico: Puede ser manual (de cuerda) o automático (que obtiene su energía del movimiento natural de la muñeca del usuario). Este último se aconseja para relojes que se usen a menudo o incluso a diario, ya que si el reloj no se mantiene en uso se acaba parando y se debe volver a accionar y ajustar a la hora adecuada.

Desde Joyería Sancho ofrecemos todo tipo de modelos de reloj con funciones y características realmente variadas, además de con una estética que te sorprenderá. ¡Échales un ojo!

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